
Corría el año 1949 cuando el ingeniero Livio Dante Porta, de tan sólo 27 años de edad, diseñó y construyó en los talleres «Puerto de Rosario» la locomotora “Argentina”, que no tardó en volverse un ícono entre estos transportes.
La locomotora a vapor de Porta era nacional por donde se la mire. No sólo porque fue íntegramente construida en nuestro país, sino también porque la pintaron con los colores de la bandera argentina y la decoraron con los lemas de la Argentina justicialista de entonces: “Mejor que decir es hacer” y “Mejor que prometer es realizar”.
La locomotora Argentina no era una máquina construida totalmente de cero, sino que era una reconstrucción de una locomotora de vía métrica, ex FC Central Córdoba. Los componentes principales, como la caldera, fueron reemplazados totalmente. Se incorporaron mejoras estructurales y termodinámicas en la locomotora reconstruida junto con una apariencia externa aerodinámica inspirada en locomotoras construidas en Estados Unidos, Reino Unido y Francia. Este fue el primer proyecto de locomotora llevado a cabo por el mundialmente famoso ingeniero de locomotoras argentino Livio Dante Porta.
La máquina Argentina sigue siendo considerada una de las locomotoras a vapor más eficientes de todos los tiempos. No obstante, también batió récords en eficiencia.
Una vez que se completaron las pruebas, la exhibición y el trabajo relacionado, “Argentina” se usó exclusivamente para trenes de carga en el FCGB. Esto continuó hasta principios de la década de 1960 y cuando la locomotora operaba principalmente en los ramales de Mira Pampa y Olavarría al suroeste de Buenos Aires. Cuando estos se cerraron, el servicio de “Argentina” se acabó.
Alrededor de 1961, después de recorrer aproximadamente 70.000 km, la locomotora se retiró del servicio activo y se dejó en un depósito de La Plata, donde permaneció hasta mediados de la década de 1970. No se sabe exactamente cuándo, pero en algún momento se movió a la provincia de Tucumán.
En el 2000 Livio Dante Porta decidió devolver la locomotora a Buenos Aires con la intención de restaurarla para ponerla en servicio, incluso planeaba incluir algunas modificaciones. Pero poco después de que esta iniciativa empezara a tomar forma ocurrió la crisis de 2001, que dinamitó toda posibilidad de rescatar la máquina.
Un grupo de entusiastas visitó la locomotora Argentina que se encontraba en un depósito en Mate de Luna, provincia de Tucumán, el 14 de octubre de 2004. Diversos factores hicieron imposibles su recuperación, entre ellas el lugar complicado en el que se encontraba la máquina y la situación económica del país.
Con el transcurso de los años varias partes de la máquina han sido robadas para venderse como chatarra, por lo que el estado abandonado de la locomotora hace que sea imposible su restauración.
Livio Dante Porta, que nació en Paraná el 21 de marzo de 1922, fue responsable de grandes mejores sustanciales en el rendimiento de muchas locomotoras a vapor que operan en todo el mundo. Estudió en Rosario y trabajó hasta su fallecimiento, el 10 de junio de 2003.
Desde 2018, tras la iniciativa de Eduardo Toniolli una calle de nuestra ciudad lleva su nombre. La misma se encuentra emplazada hacia el sureste de calle San Juan y cruza avenida Belgrano, en inmediaciones del Club Náutico.